Antes de hablar de microinfluencers cabe decir que cuando surgió el marketing de influencia, el contexto en el que utilizábamos las redes sociales era muy distinto a como lo hacemos ahora.
Cuando Instagram todavía no había lanzado su plataforma de publicidad, los influencers empezaron a crear sus audiencias publicando sobre sus amigos, familia y su vida cotidiana y esto hizo que la audiencia los sintiera muy cercanos.
Al tener los usuarios la posibilidad de comentar sus publicaciones y, en muchos casos obtener respuesta, hizo que se impulsara fuertemente este tipo de marketing y las marcas empezaron a reconocer que la influencia de estos líderes sociales era mayor que la de las celebridades.
Las celebridades tienen millones de seguidores en sus perfiles sociales, como en Instagram pero, en términos de conversiones, se quedan atrás cuando hablamos de engagement.
La gente cree, interactúa y confía más en la gente más cercana, con la que siente más afinidad.
Además la gran inversión que se requiere para trabajar con celebridades, hace que este tipo de acciones acaben no siendo rentables.
El marketing con microinfluencers cada vez tiene más peso y, en muchas ocasiones, más éxito en las campañas de publicidad que con influenciadores famosos, porque se sienten más cerca de personas que ven como iguales, gente como ellos con pasión por un sector determinado.
Las empresas aprovechan la influencia de estos perfiles para sus estrategias de marketing.
El rápido crecimiento de la publicidad en redes sociales ha hecho necesaria una regulación de la publicidad de influencers para gestionar este tipo de publicaciones.
En este artículo te explicaré todo sobre ellos y por qué es importante que los tengas en cuenta para tus estrategia de marketing en redes sociales.
¿Qué son los microinfluencers?
Los microinfluencers son usuarios de las redes sociales que se especializan en un nicho de mercado o área específica, comparten contenido en sus perfiles sociales sobre sus intereses y publican post patrocinados cuando se asocian con las marcas.
Están fuertemente conectados con su audiencia, los podemos encontrar en casi cualquier sector y tienen relaciones mucho más cercanas con los usuarios que los macroinfluencers.
Son accesibles a empresas de todas las formas y tamaños.
Un influencer es una persona que puede influir en las decisiones de compra de otras personas debido a su autoridad, conocimiento o relación con su audiencia.
Dependiendo principalmente del tamaño de su comunidad, podremos encontrar diferentes niveles de influencia.
En términos generales, aunque el rango de la cantidad de seguidores que deben tener es bastante subjetivo, podríamos decir que cuentan con alrededor de los 10.000 en Instagram por ejemplo.
Pero en algunos casos, podemos encontrar ejemplos con menos de 10.000 , digamos que ya no hay una franja de usuarios fija estipulada.
En algunos casos, trabajar con influencers con una comunidad de seguidores menor puede resultar bastante efectivo.
¿Por qué ganan terreno los microinfluencers vs los influencers?
Las marcas y los profesionales del marketing nos centramos en las interacciones entre las personas influyentes y sus audiencias, y esto se mide por el engagement, es decir, por los gustos, comentarios y la plena confianza que tienen aquellos que te siguen en los profesionales con influencia que están siguiendo.
Los microinfluencers se perciben como más auténticos que los influenciadores al uso, sus publicaciones no son tan comerciales y no se notan tan preparadas.
Son más naturales, sus interacciones son más genuinas y, por tanto, con una mayor credibilidad en sus mensajes.
También resulta más económico para la empresa colaborar con ellos, aunque los precios dependen del profesional o la agencia de marketing de influencia a través de la que se gestiona la colaboración.
Al ser más asequibles que los macroinfluencers, también puedes trabajar con múltiples personas de este “menor tamaño” a la vez.
De esta forma, también puedes tener un mayor alcance y probar otro público objetivo, si lo tuvieras, de tu marca.
O bien, también puedes probar diferentes tácticas y ver cuáles son las que mejor te funcionan.
Por contra, no tienen tanto alcance como los influencers y en el caso de que dispongan de menos de 10.000 seguidores, tienen limitadas algunas funcionalidades de las plataformas, como el deslizar hacia arriba en las stories de Instagram.
Los microinfluencers representan clientes reales y los consumidores, a pesar de que puedan admirar a las celebridades en las redes sociales, buscan opiniones en las personas cercanas, amigos o conocidos en las redes sociales.
Por eso los convierten en expertos en recomendar productos.
Mientras que los grandes influencers lanzan el mensaje a la gente en general, los pequeños lo lanzan a tu público objetivo.
Al colaborar con personas que están estrechamente ligadas a tu audiencia objetivo, las marcas tienen la oportunidad de preguntar directamente qué es lo que más te gusta, o qué es lo que más gustará a tus followers.
De esta forma, las marcas pueden aprovechar toda la información de los microinfluencers con los que colabora para conocer mejor a su público y mejorar la calidad del contenido a difundir.
¿Por qué son atractivos los microinfluencers para las marcas?
La falta de fama de los micro y de los nanoinfluencers forma parte del atractivo para las marcas.
A continuación, te explico las principales razones por las que las marcas optan por trabajar con ellos:
1.- Autenticidad y personalidad propia
Son personas que llevan, aparentemente una vida normal, que no aparecen en los medios y que no utilizan el marketing de influencia como principal fuente de ingresos, lo que los hace accesibles y asequibles.
Su vida cotidiana puede ser bastante similar a la de cualquier persona que no sea famosa, simplemente normal, y nada glamurosa, lo que la hace ganar credibilidad entre su comunidad.
En este vídeo, Nina Dantas comparte su experiencia.
La relación con su comunidad, además de ser cercana y auténtica, es personal.
Incluso en algunos casos, con comunidades más pequeñas, los seguidores los conocen personalmente y, precisamente esta relación hace que la tasa de participación social por seguidor sea mayor.
Los microinfluencers y los nanoinfluencers pueden contestar a cada comentario y mensajes directos, creando una experiencia cercana y atractiva para sus followers.
2.- Son fáciles de reclutar y trabajar
Cuanto más alto es el nivel de influencia, más difícil es llegar a ellos.
Los macroinfluencers, con millones de followers en redes, normalmente tienen muchas peticiones de diferentes marcas y, por lo tanto, acostumbran a ser selectivos sobre la marca con la que quieren trabajar.
Sin embargo, con los de menor fama no ocurre lo mismo, como puedes ver en la publicación siguiente en el comentario que deja una marca al perfil de Lucia Losada.
Algunos microinfluencers ni siquiera se consideran personas influyentes.
Por lo general, existe más flexibilidad para la negociación y colaboración entre ambas partes, lo que hace que sea una relación laboral más estrecha y amigable.
Muchos de ellos se acercan a las marcas que les gustan de forma proactiva para proponer acuerdos de colaboración para patrocinar sus productos/servicios.
Las marcas también pueden atraerles promocionando su programa de colaboradores a través de sus perfiles sociales y sus puntos de venta.
3.- Se dirigen a nichos específicos de mercado
Una de las ventajas, que hemos avanzado antes, es la capacidad que tienen los microinfluencers de dirigirse a grupos específicos de nicho.
Cuanto más pequeño sea el nicho en el que esté especializado, más comprometida tiende a estar su audiencia.
La creencia de que “cuanto más seguidores mejor” es errónea en este caso, ya que cuanto más tienen, más dispersa es su audiencia.
4.- Sienten entusiasmo por la marca
A veces no hace falta buscar muy lejos para encontrar uno de ellos que sea fan de tu marca porque es muy probable que los encuentres en tu comunidad e incluso compartiendo tu contenido.
Busca las personas que más interactúan con tu marca, porque siempre es mejor trabajar con gente que la conoce y que ya ha probado tus productos/servicios.
Si realmente disfrutan utilizando tus productos/servicios y ya tienen un vínculo de confianza con tu marca, construir la relación de colaboración va a ser muy fácil y ágil.
5.- Son inversiones de poco riesgo
Como trabajar con microinfluencers tiene un bajo riesgo, las marcas pueden permitirse experimentar y probar nuevas técnicas o acciones con ellos.
Experimenta nuevas estrategias para ver qué es lo que mejor o peor funciona con tu audiencia.
Incluso puedes probar nuevas audiencias para ver si son receptivas a tus productos/servicios.
6.- Puedes establecer relaciones a largo plazo
Pedir a los macroinfluencers una relación a largo plazo puede implicar muchísimas condiciones para las marcas, además de una inversión económica considerable.
Sin embargo, a la hora de trabajar con los de menor tamaño, estos son más receptivos a los compromisos a largo plazo.
De esta forma, familiarizan a sus seguidores con tu negocio a través de sus perfiles sociales, no solo mediante publicaciones promocionadas, sino también escribiendo reseñas sobre la marca o explicando su visión y experiencia sobre los productos y servicios.
Encuentra a los microinfluencers más adecuados para tu marca
Aunque haya mucha gente dispuesta a cerrar acuerdos de colaboración para poder patrocinar tus productos o servicios, no escojas a alguien al azar.
Es muy importante que estén alineados con la imagen de tu empresa.
Por eso, lo mejor es que investigues bien toda su actividad en sus perfiles sociales antes de proponerles que representen a tu marca.
Es importante que te asegures de que las personas con las que vayas a trabajar no representen otras marcas que entren en conflicto con tus productos.
Por ejemplo, si tu empresa se dedica a la distribución de comida vegana, no encajaría trabajar con alguien que también colabora con un restaurante especializado en carne a la brasa.
Antes de trabajar con uno de ellos, asegúrate de que su audiencia es la misma que tu público objetivo.
Los microinfluencers deberían querer trabajar con tu marca porque tendría que encajar en su nicho de mercado en el que estén especializados.
Lo ideal es trabajar con gente que incluso ya ha publicado algo sobre tu marca en el pasado de forma totalmente voluntaria.
Diferencias entre influencers micro, nano, macro y mega
A pesar de que las marcas pueden verse tentadas por colaborar con macro o mega influencers porque son conocidos entre el gran público, hay que tener en cuenta cuáles son los objetivos de marketing de la empresa: ¿más conexión con tu público objetivo o bien más conocimiento de marca entre la gente en general?
Un nano o un microinfluencer que habla directamente con sus seguidores y responde a sus preguntas puede llegar a influir en las decisiones de compra de los usuarios bastante más que los mega o macroinfluyentes.
Veamos cuales son las diferencias en cuanto al tipo de influencia que ejercen cada uno de los grupos.
Nanoinfluencers
Son perfiles con muy pocos seguidores pero especializados en un nicho de mercado, son influyentes en su comunidad.
Aunque tengan un volumen de followers pequeño, es muy probable que al hacer una recomendación obtengan perceptualmente mejores resultados que los macroinfluencers.
Los nanoinfluencers acostumbran a tener menos de 1.000 followers pero poseen una gran influencia en su círculo más cercano, al que en muchas ocasiones conocen personalmente.
Esto hace que confíen en su opinión muchísimo más que en un megainfluencer que sabe que fue patrocinado para promocionar un determinado producto o servicio.
Colaborar con un nanoinfluener puede ser muy interesante para negocios locales que quieren tener interactuar con personas offline, en lugar de llegar a un gran público.
Microinfluencers
Con un número mayor de followers respecto a los nanoinfluencers, acostumbran a involucrarse más con la audiencia, participan con ellos, interactúan sobre los temas relacionados con su nicho de mercado, aportan soluciones, consejos y opiniones personales.
Macroinfluencers
Acostumbran a tener hasta unos 100.000 seguidores, son gente famosa y conocida y colaboran de forma habitual con las marcas, normalmente a través de agentes.
Con tantas marcas compitiendo por los más famosos y populares, este nivel se ha convertido en un espacio cada vez más saturado.
Esto ha provocado que cada vez sean más caros, y se ha incrementado el número de perfiles falsos, que se crean de la noche a la mañana.
Sin embargo, estas comunidades poco sinceras son obvias porque enseguida se puede detectar su falsedad con solo comprobar el nivel de engagement.
Megainfluencers
Cuando hablamos de ellos, sabemos que hablamos de personas influyentes con millones de seguidores, con un gran alcance de sus publicaciones, por ejemplo, la cuenta de @beyonce con 127 millones de usuarios siguiéndola.
Conclusión
Los microinfluencers son una excelente forma de conseguir credibilidad hacia tus productos y servicios, y también visibilidad a tu marca.
Si tu empresa es pequeña, lo ideal es que selecciones al que sea adecuado para tu marca, y verás como sacas rendimiento a tu estrategia de marketing.
Trabajar con microinfluencers es muy rentable porque el ratio de engagement con su comunidad en redes sociales es alto y las tarifas de contratación son razonables.
Intenta encontrarlo aquellos con los que puedas establecer una relación a largo plazo porque cuánto más publiquen y hablen sobre tu marca y lo que ofreces, más efectiva será tu estrategia de marketing.